Inicio del tratamiento para PBO
Cuando nos comunican por primera vez que nuestro hijo tiene PBO, nuestro cerebro muchas veces suele hacer una asociación inexacta y rápida de lo que es nuestro bebé; ya no es un bebé compacto y completo, ya no es un todo… de repente se convierte en un bebé y un brazo, o parecido a como decía la famosa frase; “erase un bebé a un brazo pegado”.
Este concepto erróneo nos hace perder la perspectiva real del bebé y nos impulsa a verlo por separado. Y aquí reside uno de los grandes problemas a la hora de convivir y acompañar una PBO; si nosotros concebimos a nuestro propio hijo como un ser segmentado… ¿Cómo pretendemos que la información que le damos de si mismo y que el concepto que él va creando de si mismo sea el de un ser completo?
El tratamiento para PBO: un todo completo

Aquí reside la base del acompañamiento que nosotros proponemos a las familias que van a convivir y conviven día a día con una PBO. Desde el primer mes de vida, cuando un pequeño llega a nuestro centro lo tratamos como un ser único y completo. Acompañamos su desarrollo de forma que el esquema corporal se integre de la forma más simétrica posible. Proponemos siempre que las sensaciones, las presiones, los movimientos, las movilizaciones… todo vaya dirigido a estimular al niño, y no solo su brazo afectado. Si conseguimos mantener e integrar esta línea de trabajo durante todo el acompañamiento que haremos tanto los profesionales como la familia a ese bebé, una gran parte del éxito en la normalización de esa lesión la tenemos asegurada.
Esto no quiere decir que no tengamos que prestar una especial atención al desarrollo y evolución de el brazo afecto. Sin embargo, debemos hacerlo desde la globalidad del niño para no perder ese concepto tan importante: PBO.
Una vez conseguido integrar esto en nuestra forma de ver y concebir al niño, el acompañamiento será mucho más fluido y de forma natural propondremos oportunidades de aprendizaje a nuestro pequeño que integrará mucho mejor que ejercicios o actividades dirigidas sólo a estimular y rehabilitar el miembro afecto. En los últimos estudios sobre el aprendizaje a través del movimiento libre se ha demostrado que la adquisición de sensaciones, capacidades, y reconocimiento corporal es mucho mas alto si proporcionamos oportunidades de aprendizaje en las que el propio niño sea el que experimente por si solo, mientras le acompañamos, que si nosotros proponemos actividades demasiado guiadas. Este concepto lo podemos aplicar fácilmente a los niños con PBO incluyendo en sus rutinas tratamientos y movilizaciones específicas para cada una de las situaciones a las que una PBO nos puede llevar a encontrarnos.
Contacto con clínica solidaria de Ciudad Real: FIREC
Esta es nuestra filosofía, nuestra forma de vivir, acompañar y conocer la PBO, y gracias a ella ayudamos día a día a montones de familias que necesitan alguien que les lleve la mano durante el proceso de crecimiento y desarrollo de sus pequeños.
Calle Santa Teresa 22, 13003 Ciudad Real
Persona de contacto: Silvia Floria
Telf 695518761