La distocia de hombros y la PBO
Mi nombre es Ramiro Laborda y soy gineco-obstetra. Escribo este post por sugerencia de una amiga mía que tiene un hijo con PBO, abordando algunas reflexiones desde el punto de vista del ginecólogo sobre parálisis braquial obstétrica.
Como obstetra siempre es difícil hablar sobre las complicaciones que pueden aparecer en un parto. Dentro de nuestra profesión, tan bonita y gratificante en la mayoría de las ocasiones, existen esos momentos tan difíciles como son las urgencias obstétricas, y la distocia de hombros (DH) es una de ellas. A pesar de que la actuación ante una DH está bien protocolizada en la mayoría de los centros de nuestro entorno, son momentos de nerviosismo.
Prevención de la PBO

El principal problema que tenemos al abordar esta complicación es el hecho de que no se puede prevenir ni predecir. Hay pocos datos en los que nos podamos basar para intentar saber qué parto es el que se va a complicar con una extracción dificultosa de la cintura escapular (los hombros del bebé). Sabemos que hay algún factor de riesgo, como la macrosomía fetal o la diabetes materna (mellitus o gestacional), pero la gran mayoría de los partos con estos factores de riesgo transcurrirán de manera normal, y más de la mitad de las distocias de hombros no tienen ninguno de estos factores de riesgo descritos.
Por otra parte, no existe una correlación directa entre la evolución del proceso de dilatación (el transcurso desde que el cuello uterino pasa de estar cerrado a estar abierto 10 cm) y el de expulsivo (descenso de la cabeza fetal desde la pelvis materna al exterior); es decir, una dilatación “rápida” no nos asegura que la cabeza fetal salga igual de fácil ni viceversa.
Por suerte, la distocia de hombros es una complicación poco frecuente, y el hecho de producir posteriormente una parálisis braquial obstétrica, menos frecuente aún. Pero por desgracia, los casos con PBO irreversible producen un impacto importante en la calidad de vida tanto del bebé como de sus padres, y además de manera inesperada, lo que hace la situación especialmente delicada.
Derecho a la información sobre PBO
Sin entrar a valorar casos concretos, me gustaría recalcar el derecho a la información de los pacientes. Considero muy importante la comunicación fluida con nuestros pacientes, especialmente en un momento de tanta incertidumbre e importancia para ellos (vosotros) como es el parto. Pero tan o más importante es si aparece una complicación. Son momentos difíciles para todos, confusos, tristes. Es humano intentar buscar responsables. A veces los hay y a veces no (no entro a polemizar en este aspecto), pero es esencial que haya comunicación entre todas las partes.
Sabed que sufrimos con vuestro sufrimiento y nos alegramos con vuestras alegrías.
Nota: Si te sientes identificad@ ante la lesión de plexo braquial, o tienes un familiar cuyo bebe tiene PBO, no dudes en ponerte en contacto con nosotras para obtener la información que necesitas. También puedes seguirnos en redes sociales.